martes, 31 de marzo de 2020

Cuarentena en el Mandor (XIII): Llueve

Esta mañana cuando me ha sonado el despertador, llovía. Un día más, la cifra de muertos en España rondaba los 800 y pico. Además, caía agua. He consumido media mañana entre mirar el periódico, revisar la competencia y desayunar. En hacer una entrevista y otra que ya no es hablar con una fuente o un protagonista, sino hacerlo con un amigo que, además, te ayuda a elaborar un texto periodístico. Ha sido una de las charlas más enriquecedoras de todos estos días. Esa persona, igual que por ejemplo Natacha y David, es de esas que te encuentras por el camino y que te regala una profesión maravillosa, ingrata en ocasiones, pero que te permite entrar en contacto con mucha gente.
Cuando hemos colgado, seguía lloviendo.
Maggie ha venido de trabajar de la residencia de Torrent. Aquello es Mordor. No sé cómo aguantan cada jornada allí, donde convivir con la muerte se ha convertido en rutina. Ha tenido turno de noche y apenas ha podido dormir. No lo dice mucho, pero le cuesta conciliar el sueño. El lógico miedo a que le ataque el coronavirus y ver tan de cerca la tragedia no pueden mantener indiferente a nadie. En un día trepidante en que a las 15 tenía la batería al 5%, hemos reservado unos minutos para charlar y observar a los perros. Luego ha dejado de caer agua y los he bajado a dar su primer paseo.
Pero seguía lloviendo.
He tenido una tarde bastante tranquila. Todo el desgaste de hoy lo había sufrido por la mañana. He terminado de preparar un artículo para vender concienciación y optimismo. Los publicamos cada día en el periódico, se titulan "Desde la ventana de..." y creo que el protagonista de mañana dice cosas muy interesantes. Se me ha consumido el día entre cerrar la edición y los aplausos a los sanitarios. En gestionar más cosas para los próximos días. Casi no llego a escribir hoy el blog, pero da igual. Lo importante no es el hoy ni el mañana. Ni siquiera si sigue cayendo agua y subiremos chopados, mis perros y yo, del segundo paseo.
El problema es que llueve. Demasiado. Este trágico aguacero nos ha empapado a todos. 

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